Hay quien llama distancia a la falta de deseo, quien usa la
palabra platónico para camuflar su cobardía. Hay quien mantiene el silencio por
temor a que lo que salga de su garganta sea un nombre que ya debería haber
olvidado. Están los que miden el ego en centímetros, el amor en tiempo en lugar
de en suspiros, el tiempo en minutos y jamás en pulsaciones. Están los que
piensan que esa ingrata habilidad de saber pedir perdón sin despeinarse ya les
da todo el derecho de poder hacernos daño. Están los que hablan de imposibles
porque no fueron capaces. Los que llaman soledad a la incapacidad de estar con
nadie. Los que se quedan con la duda eterna por temor a la respuesta. Los que
confunden esperanza con optimismo. Los
que culpan al destino de sus errores y llaman intuición a cada acierto. Los que
piensan que tener orgullo es más importante que tener a alguien. Los que lanzan
una promesa como un globo, olvidando que pesa como una roca. Esos seres
perfectos que van de cuerdos cuando la peor locura es parecer demasiado
sensato.
Cuánta razón tienes; esos seres extraños y alienígenas viven en una locura disfrazada de cordura, que en realidad, es etérea.
ResponderEliminarBesitos.
Miss Carrousel
Aquí tienes una seguidora más. Es precioso todo lo que escribes.
ResponderEliminarBesitos.